PERSONA HUMANA
(La verdad, contada a adolescentes, tema 1/16)

a) Creación y evolución ... d) Igualdad
b) Materia y espíritu ..... e) Dignidad
c) Cuerpo y alma ........ f) Felicidad
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a) Creación y evolución

En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Dios creó todas las cosas de la nada, con sabiduría y con bondad, y se las encomendó al hombre, al que creó a su imagen y semejanza, y al que le reveló su voluntad divina.

Anteriormente, Dios ya había creado también al gran ejército de los ángeles (seres sólo espirituales) para que guardaran a sus hijos los hombres en su peregrinar por la tierra.

Además de la creación, Dios dio también a todas las cosas la capacidad de evolucionar. Ahora bien, la evolución se produce sólo en las criaturas materiales, y nunca lo hace en el alma espiritual, que es creada directamente por Dios para cada persona.

b) Materia y espíritu

En este mundo creado por Dios, vemos que existen multitud de cosas que podemos ver y tocar (los sentidos, los instintos, los sentimientos…). Son el conjunto de las cosas materiales que Dios dejó al hombre para que las disfrutara y utilizara.

No obstante, Dios también creó otra serie de cosas espirituales (que no vemos ni tocamos, pero sí sentimos), que no caducarán con este mundo, y que revelan la gran dignidad que lleva dentro el hombre. Son la alegría, la inteligencia, el arte, los idiomas… que hacen al hombre distinto de forma sustancial al resto de antropoides inferiores o monos.

c) Cuerpo y alma

El hombre, en cuanto persona humana, está compuesto de dos elementos totalmente distintos, y que son:

- Cuerpo. Es la parte material de la persona (uñas, ojos, tobillos…), que nace, crece, se reproduce y que acabará muriendo y descomponiéndose.

- Alma. Es la parte espiritual (divina) de la persona, que es creada directamente por Dios para cada persona, y que es única, diferente e irrepetible. El alma no nace, no crece, no se reproduce y no acabará muriendo ni descomponiéndose. Volverá a Dios, que decidirá su forma y su destino.

d) Igualdad

Al principio, vio Dios que no era bueno que el hombre estuviera solo. Decidió entonces Dios crear a la mujer como una ayuda adecuada a ese hombre que había creado, y para que el hombre pudiera cuidar de la tierra.

El hombre y la mujer son iguales en cuanto que tienen los mismos derechos y las mismas oportunidades (estudios, familia, trabajo…), ya sean de diferente cultura, credo o edad.

Y son diferentes en cuanto que tienen diferentes funciones, psicología y formas de ser, y se necesitan el uno al otro para complementarse y enriquecerse.

e) Dignidad

En el principio, Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y le comunicó “su espíritu”. Este espíritu que Dios introdujo en el hombre fue su imagen y su semejanza.

Tener la imagen de Dios significa tener su misma forma, sus mismas cualidades sin falta de ninguna, y no perder este privilegio por ninguna circunstancia de la vida.

Ser semejantes a Dios quiere decir que esta imagen de Dios puede:
- acrecentarse (haciendo el bien, su voluntad),
- disminuirse (haciendo el mal, lo contrario a su voluntad).

f) Felicidad

Desde siempre, en el hombre ha habido un deseo de felicidad ilimitada. Esta felicidad que siempre el hombre ha deseado debe estar basada en:

- el buen uso de las cosas (Dios nos permitió disfrutar de todo menos de lo que Él prohibió),
- el respeto absoluto por los bienes ajenos (todos tenemos derecho a disfrutar de todo).

Ahora bien, la felicidad en este mundo sólo puede ser conseguida de forma agridulce y de forma relativa, pues sólo en el otro mundo está la otra cara de la moneda de lo que aquí nos falta por entender.